Introducción:
¿Pueden las creencias superarse?
Las creencias mueven el mundo. Se han convertido en el principal sistema de conocimiento de la realidad. Esto tiene razones profundas.
Los seres humanos “saltamos” de una creencia a otra. Nos cobijamos en la fuerza del grupo, de su número y “autoridad”. Vamos perdiendo poco a poco nuestra capacidad de discernir, de contrastar con la razón y la empatia visiones distintas para integrarlas y encontrar equilibrio.
Nos hemos vuelto perezosos y desconectados de nuestro discernimiento individual. Y lo peor es que ni siquiera somos conscientes de ello. No buscamos verdad, replicamos las de otros. Cedemos nuestra voluntad a la de masas, grupos o pensamientos grupales. Buscamos modelos de vida en “ídolos de barro”, como actores de cine, famosos o en grupos mayoritarios.

Hay otras opciones. Otros sistemas de conocimiento más allá de seguir, de imitar. Sistemas conectados a tu voluntad y tu conciencia.
Vamos a introducir este complejo tema de manera sencilla, para que que aquellas personas que estáis interesadas en el crecimiento personal, podáis usar este conocimiento si lo deseáis en vuestras vidas diarias.
Las creencias como sistemas de conocimiento:
Las creencias son sistemas de interpretación de la realidad, totalmente subjetivos. Este sistema de interpretación de la realidad puede ser compartido en parte con culturas, grupos sociales, familia, y otros entes colectivos. Las creencias de por si, no necesitan de validación externa. Eso quiere decir que como son completamente subjetivas, no quiere decir que sean ciertas según parámetros universales.
Se basan mas en asociaciones cognitivas emocionales, que en razonamientos lógicos, o análisis contrastados de información o conocimiento. Las creencias tienen una base principalmente emocional, y no racional.
La “naturaleza” de las creencias:
La naturaleza de las creencias es gregaria, es decir que esta basado en patrones de imitación o seguimiento, necesidad de integración en grupos como afianzamiento de la autoestima y seguridad personal. Las creencias son un sistema de conocimiento que no está conectado a niveles elevados de conciencia.
Esto significa que las creencias no están conectadas a la esfera del razonamiento, y que tampoco está conectada a nuestra realidad espiritual mas elevada, lo que llamamos “ser superior”. Tampoco hay discernimiento, es decir, contraste de diferentes razonamientos, teorias o sistemas de conocimientos tanto intelectuales como metafísicos, para llegar a una o varias conclusiones abiertas de realidades y asuntos.
Actuan como una barrera para la razón y el discernimiento, como podemos ver graficamente en este esquema:

La naturaleza de una creencia se basa en la identidad. La identificación emocional con un sistema de interpretación de una realidad dada.
Algunos ejemplos:
Hay creencias en sistemas empresariales , en familias y sistemas ancestrales, en culturas, en religiones y en otros muchos sistemas, en casi todo. Y la mayoria de nosotros seres humanos estamos “insertados” en varios de ellos desde que nacemos y comenzamos a interactuar con el mundo.
Un grupo de personas numeroso por ejemplo, puede creer que la tierra es plana, por mucho que haya datos contrastados y dudas que esto pueda ser así.

Otro grupo igualmente numeroso, puede creer que un virus mortal asola el planeta y nos va a matar a tod@s, aunque haya muchos datos razonables oficiales que indiquen que no sea más letal que una gripe virulenta con bajo índice de mortalidad a nivel de población global.

Mucha gente cree que los “huevos suben el colesterol y son dañinos” en cantidad diaria, cuando no hay ninguna base científica ni nutricional para ello.

La publicidad:
El ejemplo más claro es el de la publicidad. La publicidad (salvo honrosas excepciones) son estrategias de manipulación emocional para comprar un producto o productos, y hacernos “creer” que este o estos pueden hacer mejores o más felices nuestras vidas. Sea esto cierto o no. No importa qué. Coches, detergentes, ropa, un lugar de vacaciones, una vivienda, lo que sea. Un ejemplo puede ser los anuncios de automoviles, donde se apela a sentimientos de libertad, o de sentirte exclusivo, o mas “poderoso” para que este producto nos resulte imprescidible. Es todo emocional. La publicidad hoy día además llega a extremos poco éticos para “convencernos” para comprar un producto.
Cualquier medio se usa para que consumamos algo, por agresivo que sea.

La “guerra de los mundos”:
Uno de los ejemplos más claros en la historia de donde nos puede llevar una creencia, es el evento de la “guerra de los mundos”.
A mediados del siglo XX en USA, se realizó un programa de radio ficticio sobre una invasión alienigena, una novela radiofónica, que llevo a miles sino millones de personas a “creer” que realmente estaba sucediendo, y colapsar un pais, entrando en pánico. Aquí puedes leer más acerca de ello. Es un ejemplo claro de como se lleva a cabo la programación o ingeniería social a través de los mass media creando realidades que solo son tales en la mente de aquellos que se insertan en ellas.
Los medios de comunicación globales son el sistema mas poderoso y usado para implantación de creencias.
Algo puede parecer tan real cuando “crees en ello” que convierta tu realidad en una película o una pesadilla. Incluso cuando realmente no esta sucediendo nada en absoluto.

¿Decidimos o repetimos?
Muchas de las decisiones que tomamos, incluso las más banales, se realizan desde estos sistemas de creencias. Desde lo que comemos, vestimos, donde vivimos, que deporte o no hacemos, hasta incluso la pareja que elegimos. Es un gran shock que muchas personas no están dispuestas a admitir.
Comemos muchas veces guiados por publicidad o programas culturales implantados, vestimos conforme a creencias de nuestro grupo social o ideología; elegimos a nuestras parejas en base a condicionamientos sociales y culturales. Más de lo que podamos imaginar. Es una ilusión pura y dura de elección. Donde muchas de las elecciones no son conscientes, sino subconscientes.
MEDITACIÓN Y EQUiLIBRIO

Creencias y exclusión:
Muchos sistemas de creencias tienen tendencia a la exclusión, es decir, no contemplar otra forma de ver las cosas que la que se cree en tal sistema. Este fenómeno podemos verlo en religiones, grupos sociales, ideologías, deporte, y un larguísimo etcétera. No es casualidad que el mundo esté plagado de guerras y conflictos a causa de creencias de todo tipo.
Fosilización:
Esto es algo característico de la creencia perpetuada en el tiempo. Tiende a “cristalizar” o “fosilizarse”, es decir, a convertirse en un modo de vida, a fijarse en tu mente. Además las personas suelen identificarse con ellas incluso hasta extremos absurdos, o peligrosos, defendiéndolas a veces fanáticamente. Solo tenemos que echar un vistazo al mundo para darnos cuenta de que ciertas creencias pueden llevarnos al horror, como la guerra, el terrorismo, el nacionalismo, o la limpieza étnica, entre otros muchos.

Creencias mayoritarias y “autoridad”.
Otro dato importante a tener en cuenta es qué sucede cuando ciertas creencias se convierten en mayoritarias. Estas toman un falso cariz de autoridad, mayor que si estas son solo profesadas por unos pocos. No importa que tipo de creencias sean. Muchas personas siguen ciertas creencias porque son mayoritarias o muy numerosas y les da una mayor sensación de seguridad o autoridad, amparados en una institución o grupo numeroso y poderoso de personas. Tv, religiones, influencers varios, etc.

Las creencias no conscientes anulan tu voluntad o pueden anularla. Esta puede ser “secuestrada” por el grupo al que pertenece esta creencia. Pensamiento grupal frente a individual. Supeditando tu voluntad al grupo. Es el fenómeno de “mente colmena”.
MEDITACION Y EQUILIBRIO
¿Como operan las creencias?
Las creencias funcionan como “programas” de ordenador. Un programa de ordenador tiene unas directrices, unos “comandos” de lo que puede hacer y para que sirve. Esto quiere decir que un programa informático por ejemplo, de control de gastos e ingresos, esta limitado a esa esfera operativa. No sirve para otras cosas, y por tanto, solo operará en ese ámbito. No reconoce ni “entiende” otras directrices. En nuestra vida pasa algo similar. Nuestras creencias y sistemas de creencias, son programas. La vida se convierte en “software” programado.

La buena noticia es que los programas no tienen porque ser eternos o de por vida. Se pueden cambiar por otros. Y podemos controlarlos nosotros mismos desde nuestra conciencia. Siendo sus “programadores”. Evitando que otros nos programen.
¿Podemos “librarnos” de las creencias?
Las creencias son parte de nuestro camino de desarrollo como seres humanos, parte de nuestro “diseño original”.Con ellas experimentamos la diversidad , lo diferente a nosotros. Las usamos para aprender en la vida, entender y aplicar sistemas e ideas diferentes a través de los cuales paradojicamente entendamos “el todo”. Pueden incluso ayudarnos en determinadas fases de nuestras vidas a construir nuestra personalidad presente. A ciertos logros personales. Usadas sabiamente pueden programarnos para cosas positivas. Entendiendo que son solo sistemas que debemos usar y descartar cuando hayan cumplido su función. Aquellas creencias que deseemos conservar también pueden tomar otro “color” iluminados por la conciencia.
La metáfora de las “gafas”:
Tus creencias son como “gafas” que te pones para interpretar la realidad. Depende del cristal, el color y el tipo la ves y sientes de una manera. Pero tu no eres las gafas. Las gafas son solo herramientas, sistemas de interpretación de la realidad. Como con unas gafas , al tiempo se rayan, se ensucian, y dejan de servir. Debes cambiarlas por otras nuevas. Lo que esta detrás de las gafas es lo que tu eres realmente, un ser eterno lleno de potencialidades. Si identificas lo que eres con unas gafas, te aferras a algo que no eres, dependiendo de ello. Además cuando esas gafas ya no sirvan, y se resquebrajen, si te identificas con ellas, te sará , mas dificil cambiarlas por otras que te hagan ver cosas nuevas, y te traigan nueva claridad a tu vida.

Despertar a nuestra conciencia.
Detrás de nuestros pensamientos y nuestras creencias hay un núcleo trascendente.
Un núcleo luminoso, eterno y poderoso donde residen cualidades ilimitadas que todos portamos. Que sabe que no somos solo nuestras creencias. Sin saberlo ese núcleo es el que hace que nuestras vidas cambien y nuestra evolución siga. Cuando no estamos en contacto con el es cuando las creencias dominan nuestra vida y se hacen rígidas y fósiles. Para poder ir cambiando nuestra realidad, y que esta dependa cada vez menos de lo externo, es esencial la búsqueda de ese núcleo y el contacto con el.
Algunas conclusiones y herramientas:
Aquí os dejo algunas estrategias que a mi me ayudan y pueden resultaros útiles:
- Desprogramacion: deconstruir como hemos aprendido a interpretar la realidad “siguiendo a otros”, en vez de escuchar a nuestra conciencia, y usar un análisis complejo , en vez de “seguir o asumir creencias de otros”. Pensamos menos de lo que creemos. Muchas veces solo repetimos lo que otros (familia, tv, amigos, opinion mayoritaria social, etc) han dicho. Creemos en estas autoridades subconscientemente porque hemos sido programados para ello. Nunca las hemos cuestionado (o poco). Esto es algo dificil, pero no imposible. Lleva años desprogramarse mentalmente de creencias asumidas que nos limitan. En muchos casos es dificil porque supone cuestionar nuestras vidas, todo lo que hemos “creido” durante decadas, y eso requiere una honestidad y fuerza interna titánicas. Es un verdadero despertar duro. Pero te libera y te sana.

- Reprogramación: Las creencias pueden ser útiles. Si somos conscientes podemos usar sistemas de creencias para avanzar. Podemos mantener nuestra voluntad y no cederla a grupos o terceras personas. Usar la herramienta de autoprogramación para superar muchas cosas. Desenergizando estas herramientas y abandonándolas cuando ya no nos son útiles.
- Apertura: Todos tenemos creencias. Pero puedes hacerlas mas abiertas, puedes ser consciente de que son “parches temporales” en tu vida y que cambiarás. No aferrarte a nada. Y aquello que quieras integrar en tu vida, cualquier creencia, no sea excluyente. Repasa tus creencias y principios personales. Y abrelos. Siente que no son el fin sino un medio. Entiende que son herramientas. Y que otros tienen las suyas. Y que hoy crees en unas herramientas pero quiza mañana te hagan falta las que hoy rechazas. Si crees algo está bien. Será lo que en ese momento necesitas. Pero nunca hagas de.una creencia “la verdad” por encima de otras. Es solo una creencia.
- Meta-analisis consciente: ser capaz de analizarte a ti mismo. Sentir la diferencia entre tu ser y el creer. Entre lo pensado y el pensante. Observar nuestras emociones al hablar con otros sobre un tema. Sentir nuestra reacciones. Ver “de donde parte nuestra respuesta”. Si hay escucha o solo defensa emocional. No somos (solo) lo que pensamos. Hay diferencia entre “los pensamientos” y el “pensante”. Estos ejercicios se pueden realizar. Son ejercicios de auto-observación consciente. Nos paramos a observar nuestros pensamientos. Se puede realizar clara y facilmente en la meditación , pero también mientras conversamos. Caer en la cuenta de la diferencia entre lo pensado y el pensante es crucial. La meditación es la herramienta mas poderosa para lograr esto.

- La escucha consciente: Muchas conversaciones son monólogos. No hay escucha ni meta-análisis de las propias emociones que provocan las ideas de otros. No hay comunicación. Antes que una persona termine de exponer su pensamiento sobre algo se reacciona. El discernimiento proviene de la escucha, de la “no reaccion” emocional o el control de esta. De la empatia y la integracion de visiones diferentes pero complementarias que puedan dar lugar a una tercera: el equilibrio. De situarnos más allá de creencias, en nuestra conciencia. La reacción emocional activa mecanismos físicos y energéticos de “defensa” y protección que impiden la escucha y la comunicación.
Obviamente esto no supone que debas convertirte en una suerte de “robot” sin sentimientos. Es más bien todo lo contrario. No limitarte a ver y sentir solo tu parte sino “el todo”. No vivir en la ilusión de la polaridad donde todo lo que no seas tu o tus creencias sean “enemigos”.

- Empatía: La empatía es una cualidad que te reconecta con tu conciencia. Es ponernos en el lugar del otro y sentir su realidad. Esto es algo clave. Desde este nuevo espacio es posible el crecimiento y la comunicación. No se trata de entender intelectualmente la “posición” del otro u otros. Es tratar de llevarlo a un sentimiento profundo en tu corazón que conecte con la realidad del otro. Unión, sentimiento de conexión entre todos. Así la diversidad se sentira como una oportunidad de integración y aprendizaje y no de división y lucha.

- Honestidad. El meta analisis y la presencia consciente en una conversacion por ejemplo, deben ser honestos. Nuestra propia mente desea “autoafirmarse”. Tener la razon. Imponerse. Si hay honestidad para con uno mismo, y estamos conectados a nuestra conciencia, admitiremos las verdades que escuchemos. Esto es algo muy dificil. Requiere entrenar una conexión más alla de la reacción y la defensa. Una empatia y autoobservación honesta. Un deseo de crecimiento e integración.
- Conocimiento de tu realidad energética y espiritual. Esto es lo más complicado. Porque estamos programados por el materialismo a negar esta posibilidad. O a tomar como opción el dogma y la creencia de las religiones, que se han convertido en sistemas de creencias y no de iluminación o conocimiento de tu realidad espiritual. Osea más de lo mismo. Por un lado u otro creencias. El conocer tu realidad espiritual no es creer en fabulas. Ni leer libros y asumir lo que dicen. Es experimentar esta realidad. Meditacion, regresión, visualización, yoga nidra (sueño consciente), e introspección son algunos de los métodos.
- Reconecta con tu corazón: Lo más importante. La compasión, la empatía y el amor pertenecen al corazón. Pueden ayudarte a sentir la diversidad como camino a crecimiento e integración. A construir la verdad admitiendo todas las visiones.
- Confia en tu “intuición”. Otro importante ya lo conoces. Si. Es cuando “sientes” los ambientes y las personas más alla de analizarlas mentalmente. Todos lo hacemos a diario inconscientemente. Y muchas veces sacamos más en claro que si solo nos fijamos en la ropa, posición social, o lo que esa persona “nos dice”. No hablo de interpretación mental de gestos o comunicación no verbal ( aunque es importante). Hablo de “sentir” a otros. Sentir su energía, otros aspectos más allá de su ropa o su aspecto. Cuando das un abrazo no analizas, sientes. Si amas a alguien o lo sientes cerca de ti, se activa esta forma de conocer. Al entrar en lugares y no sentir “buenas vibraciones”.
El problema es que este sistema de conocimiento lo usamos inconscientemente. A veces si y otras no. Y las personas no solo no conocen que existe , sino que no confian en el y no lo entrenan. Y se puede entrenar. No hace falta irse al Tibet ni conocer a ese maestro de película.
Hay multitud de métodos disponibles. Solo tienes que buscarlos. Investigar. Y observarte diariamente para reconectar con esta sabiduría interna.
En el próximo artículo hablaré de otro tema directamente relacionado con las creencias: los egrégores.
¡ No te lo pierdas!
1 comentario en “Las creencias y cómo superarlas.”
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